Escritura Creativa con
EL LIBRO ROJO DE JUNG
Este apartado tiene por objeto entregarles la síntesis de lo visto en la primera parte del taller.
I LIBER PRIMUS
Prólogo.
Da inicio al Liber
Primus tres citas bíblicas, dos del profeta Isaías y una de Juan.
Las dos citas de Isaías nos remiten a esa primera impresión
ante el llamado de una voz poderosa que nos habla para que seamos portadores de
un mensaje.
En la literatura ese primer llamado es signo de vocación.
Además, la cita de Juan es precisamente aquella que tiene que ver con la palabra como algo gestado por el hombre. Y el verbo se hizo carne.
Además, la cita de Juan es precisamente aquella que tiene que ver con la palabra como algo gestado por el hombre. Y el verbo se hizo carne.
En el Libro Rojo el profeta anunciará lo venidero, de esa forma da a luz con su palabra otra realidad.
Aparece el espíritu de la profundidad como poderosa esencia
a la que es complicado escapar… en caso de negarse a ella, esa profundidad
persigue al hombre, y por supuesto que el hombre podría escapar continuamente y
hacer de su vida un continuo escape, de hecho así es la mayoría de las veces.
En este prólogo se presenta a Jung aceptando este llamado de la profundidad.
Aparecen los conceptos de "espíritu de la
profundidad", "espíritu del tiempo", "sentido",
"contrtasentido", "suprasentido".
I
Una vez asumido el llamado Jung se encuentra con el alma..
El diálogo con el alma se presenta como el diálogo con alguien con quien
hablamos de nosotros, pero que no obstante sabe más de nosotros que nosotros
mismos.
II
Llamado al alma para que nos atienda en la búsqueda de
trascencia.
Llamar al otro... el "otro" es tu dios en tanto es lo que te falta para la completitud.
Llamar al otro... el "otro" es tu dios en tanto es lo que te falta para la completitud.
III
Servir al alma, seguirla, ir a donde el alma lleve, recordar
que el alma ya ha mostrado que sabe más de nosotros, aunque sus caminos son
tortuosos… El alma siempre te lleva a someterte a lo más temido.
IV
El desierto, como experiencia de encuentro con el alma.
"¿No sabes aún que no estás escribiendo un libro para
alimentar tu vanidad -dice el alma a Jung- sino que estás hablando
conmigo?"
En la literatura el libro se torna un diálogo con nosotros
mismos, lo escrito es una forma de liberar al espíritu de la profundidad para
que nos hable a través de sus símbolos.
V
Viaje infernal al futuro. Porque todo el que atiende al
espíritu de la profundidad ve en su interior que todo pasado está en el futuro,
y que todo lo que el hombre ha pospuesto resolver, está esperando en su futuro
para ser resuelto. De ahí que la guerra sea una forma de exponer al hombre a
resolver su propia guerra interior. El tiempo no estará maduro mientras sea
posible asesinar al hermano en lugar de asesinar dentro de uno lo que uno está
rechazando del hermano.
En este apartado aparecen los pensamientos como los ruidos
que no dejan al hombre escuchar al alma. Cuando los pensamientos se interponen
sucede que creemos estar hablando con el alma, y no. Hablar con el alma es ver
al pensamiento echado a tus pies como un perro fiel que te ama y no te
interrumpe. De lo contrario, sería como un perro que ladra desaforadamente,
esos son los pensamientos, ladridos que no dejan al hombre escuchar a su alma.
VI
El espíritu dividido.
El desierto no está vacío, está frecuentado por seres
mágicos que atacan al que se decide a atravesarlo. Pero el peor ataque es la trasformación
del propio atacado: esos seres te convierten a ti en monstruo. Para Jung los
dioses negados se vuelven enfermedades.
VII
Asesinato del héroe.
Cuando Dios se vuelve demasiado viejo se convierte en
sombra. Nuestros dioses quieren ser superados. Los dioses que adoramos son
fórmulas humanas.
"No obstante Dios es inevitable, y cuanto más trates de
escapar, más seguro que caerás en su mano", dice Jung.
En este apartado vemos que un joven dios germinal es regado
por las lágrimas de los hombres, dando a toda la oscuridad el sentido
trascendente. Como en las obras clásicas donde el final trágico encierra la
renovación.
VIII
Concepción de Dios.
El alma concibe al niño divino, un dios que ha nacido de la
integración de lo relativo. La literatura no concibe moralizar en tanto es
alejarse de la integración de la sombra.
IX
Misterium/Encuentro
El encuentro de Jung con dos arquetipos, el anciano erudito
que se pudre en su biblioteca, y Salomé, le permiten a Jung explorar por
mediación de los símbolos una postura más afín con el espíritu de la
profundidad. Estos símbolos no son totalmente fieles a sus orígenes, toman de
su fuente histórica una parte y la otra aparece de la nueva clave con que el
espíritu de la profundidad hace que Jung las vea.
X
La instrucción
Los símbolos se explica por sí mismos. Dejamos hablar al
símbolo, es su voz no la nuestra.
XI
Resolución
"Si vas hacia el pensar lleva tu corazón contigo, si
vas hacia el amor lleva tu cabeza contigo".
Siempre la unificación.
Fin de la primera parte del Libro Rojo
No hay comentarios:
Publicar un comentario